La provincia de Almería, conocida por sus extensos invernaderos, se embarca en un proyecto innovador: Dynamic AquaSave. Este proyecto busca integrar paneles solares en los invernaderos para generar energía limpia, reduciendo el consumo de agua y mejorando la eficiencia agrícola. Se espera que este modelo pionero transforme la agricultura almeriense y la posicione como referente mundial.
Un congreso andaluz sobre agricultura, energía y agua, celebrado en la Universidad de Almería, anticipó la posibilidad de revolucionar la agricultura intensiva mediante placas fotovoltaicas en invernaderos. El profesor Ángel Carreño destacó la viabilidad de cubrir las necesidades energéticas de un invernadero con un mínimo sombreo de placas solares.
Siete años después, esta visión se materializa en el proyecto Dynamic AquaSave, un proyecto pionero que busca transformar el modelo agrícola almeriense.
La NASA reconoce la envergadura del "mar de plástico" almeriense, visible incluso desde el espacio. Este extenso territorio, de 32.000 hectáreas, produce anualmente cerca de cuatro millones de toneladas de alimentos, generando un impacto económico significativo para la provincia (40% del PIB).
Dynamic AquaSave propone convertir este "mar de plástico" en un "mar energético", capaz de producir tanto alimentos como electricidad.
La Universidad de Almería, junto a Barre Invernaderos, Tecnalia, la Fundación UAL-ANECOOP y con financiación del CDTI, lidera este proyecto, formalizado en noviembre de 2024 y ratificado en febrero de 2025.
El sistema consiste en la instalación de paneles solares transparentes o semitransparentes en las cubiertas de los invernaderos, orientados automáticamente mediante un algoritmo. Estos paneles actúan como sombreo dinámico y generan electricidad.
Según el catedrático Diego Luis Valera, este sistema integra generación fotovoltaica y sombreo dinámico, algo inédito en el mercado con los parámetros requeridos para invernaderos del sureste español. Se esperan ahorros de agua de hasta un 30%, reducción del blanqueo, microclima más estable, autoconsumo o venta de energía y mejores condiciones laborales.
El prototipo se instalará en la Fundación UAL-ANECOOP, con un invernadero testigo para comparar resultados. La fase de experimentación, que durará al menos dos campañas agrícolas, está prevista para el otoño de 2025.
La Universidad de Córdoba participa desarrollando software y hardware para el control de los paneles. La combinación de ingeniería agrícola, inteligencia artificial y energías renovables hace de este proyecto algo único a nivel internacional.
Dynamic AquaSave no se limita a la energía solar; busca integrar inteligencia artificial mediante sensores y algoritmos para predecir cosechas, optimizar el riego y la fertilización, y reducir la huella hídrica y de carbono.
El proyecto también explora sistemas pasivos de microclima para regular temperatura y humedad sin gasto energético, favoreciendo el control biológico de plagas y reduciendo insumos. Se apoya en redes internacionales para la rápida implementación en explotaciones reales.
A pesar de los avances tecnológicos, persisten desafíos como la sobreexplotación de acuíferos y los problemas sociales del campo almeriense. Investigaciones académicas señalan la sobreexplotación de acuíferos y la generación de residuos plásticos, mientras que se denuncia la precariedad laboral de trabajadores migrantes.
El reto trasciende lo energético; se busca que el "mar de plástico" se convierta en un espacio agrícola que combine innovación, justicia social y sostenibilidad ambiental. Solo así, Almería podrá evolucionar de milagro verde a modelo mundial de agricultura del futuro.
Imágenes | kallerna y Unsplash
Xataka | Cuánta electricidad produce cada país del mapa con energías renovables, expuesto en un gráfico