El acuerdo para mantener TikTok en Estados Unidos establece un precedente significativo en la compleja relación tecnológica entre China y EE.UU. Este modelo, denominado "plantilla TikTok", podría allanar el camino para la entrada de otras tecnologías chinas al mercado estadounidense. Se basa en una estructura de control mayoritario estadounidense, con participación minoritaria de la empresa china, ofreciendo una alternativa a la prohibición o la venta completa.