Un hombre fue arrestado el sábado en el estadio State Farm de Glendale, Arizona, antes del funeral de Charlie Kirk, por hacerse pasar por agente del orden y portar un arma. Joshua Runkles enfrenta cargos por este incidente, que generó preocupaciones de seguridad en el evento de alto perfil. El funeral, clasificado como evento de nivel 1 por el Departamento de Seguridad Nacional, contará con la asistencia de importantes figuras políticas.
Un hombre armado que afirmaba estar afiliado a las fuerzas del orden fue detenido el sábado tras acceder al estadio de Arizona donde se celebraría el funeral del activista conservador asesinado Charlie Kirk, según fuentes policiales.
Joshua Runkles fue acusado formalmente de un delito grave por usurpación de funciones y de un delito menor por posesión de arma en lugar prohibido, según las autoridades, que hablaron bajo condición de anonimato debido a que la investigación continúa.
Los registros de la Oficina del Sheriff del condado de Maricopa coinciden con los cargos y el nombre del sospechoso. Según un agente del orden, no existen antecedentes de arrestos previos de Runkles. La fiscalía solicitó una fianza de 5000 dólares, pero la corte fijó una fianza de 500 dólares más la supervisión de los servicios previos al juicio.
El Departamento de Seguridad Pública de Arizona no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. No se ha confirmado si Runkles ha contratado a un abogado.
El Servicio Secreto emitió un comunicado el viernes por la noche indicando que sus agentes habían detenido a un hombre que había ingresado al estadio State Farm de Glendale, Arizona, ese mismo día, tras observar “comportamiento sospechoso”.
Al ser abordado por el personal del Servicio Secreto, el individuo afirmó ser miembro de las fuerzas del orden y declaró estar armado, según el comunicado del servicio.
“El individuo no es miembro de las fuerzas del orden autorizadas que trabajan en el evento”, aclaró el servicio. “El Servicio Secreto de los Estados Unidos y las fuerzas del orden locales están investigando las circunstancias por las que se encontraba en el lugar”.
La aparente entrada no autorizada generó inquietudes sobre la seguridad del evento conmemorativo programado para el domingo. El recinto está lleno y se espera la presencia del presidente Donald Trump, el vicepresidente JD Vance y otros funcionarios de alto rango.
El hombre portaba al menos una pistola y un cuchillo al momento de su detención, según un agente de las fuerzas del orden familiarizado con el caso, quien habló bajo condición de anonimato porque el hombre no había sido arrestado ni acusado en ese momento. También mostró “credenciales policiales inactivas” y dijo a los agentes del Servicio Secreto que estaba allí para brindar seguridad privada, según el funcionario.
Un portavoz del Departamento de Policía de Glendale remitió las preguntas al Servicio Secreto.
El Departamento de Seguridad Nacional clasificó el funeral de Kirk como evento de nivel 1 en la Escala de Evaluación de Eventos Especiales (SEAR), una designación que permite al Gobierno federal asignar amplios recursos de seguridad, similares a los de la Super Bowl.
Equipos del Servicio Secreto habían estado trabajando durante varios días coordinando la seguridad con otros funcionarios policiales federales, estatales y locales, y se esperaba que comenzaran a establecer un perímetro alrededor del estadio el sábado, según el funcionario policial.
Kirk, fundador del grupo conservador Turning Point USA, fue asesinado a tiros el 10 de septiembre mientras daba una charla en un campus universitario de Utah. Tyler Robinson, de 22 años, fue detenido tras una búsqueda de más de un día y acusado de asesinato.
